Creación de CardioRed1
La creación de CardioRed1 ha sido gradual hasta finalmente conseguir una estructura y unos objetivos definidos con el apoyo y supervisión de la Consejería de Sanidad de Madrid.
La creación de CardioRed1 ha sido gradual hasta finalmente conseguir una estructura y unos objetivos definidos con el apoyo y supervisión de la Consejería de Sanidad de Madrid.
En los antecedentes de esta constitución, cabe señalar que la asistencia cardiovascular en el Hospital Clínico San Carlos está enmarcada, desde el año 98, en el seno del Instituto Cardiovascular. En ese momento, la atención cardiovascular en este centro se encontraba dispersa tanto física como orgánicamente, identificándose cuatro servicios totalmente dedicados a esta atención (cardiología, exploración cardiopulmonar, cirugía cardiaca y cirugía vascular).
El Instituto nace fundamentalmente con un espíritu de cambio, con la aspiración de mejorar la atención al paciente y bajo el paraguas de la búsqueda de la eficiencia y la mejora de la calidad, que sólo puede lograrse a través de la participación activa de los profesionales que integran la organización.
En los últimos años se ha ido consolidando una red eficaz de atención aguda cardiovascular conformada por cuatro hospitales en Madrid. La iniciativa fundamental era la distribución con el resto de hospitales de profesionales expertos en un procedimiento específico para así concentrar el conocimiento. Es el profesional el que se acerca al hospital semanalmente para practicar su intervención. Así, el paciente no se desplaza lejos de su centro de referencia pero tiene acceso a un clínico especializado en su procedimiento. Esto no solo consigue mejores resultados en salud para el paciente, sino que también fomenta un espíritu de confianza y respeto entre los profesionales y líderes de los distintos centros. Este modelo de trabajo comenzó entre el H. Clínico San Carlos y el Hospital Severo Ochoa (2003). Tras comprobar que daba resultados de éxito se extendió al H. Príncipe de Asturias (2012) y al H. de Fuenlabrada (2018).
La concentración de la complejidad y el volumen en el tratamiento de las patologías más complejas mejora los resultados y permite la formación de equipos expertos.